viernes, 27 de junio de 2025

Las Gratitudes


" ¿Os habéis preguntado alguna vez cuántas veces al día dais las gracias?... 

¿Os habéis preguntado alguna vez  cuántas veces en la vida habéis dado realmente las gracias? Unas gracias sinceras. La expresión de vuestra gratitud, de vuestro agradecimiento, de vuestra deuda. "


Con este párrafo comienza mi última lectura, una novela corta que me ha hecho reflexionar sobre los temas que aborda. Evidentemente,  uno de ellos es la importancia de ser agradecido, y de serlo a tiempo.


La vejez, el paso del tiempo, la memoria, la enfermedad, son asuntos que la autora trata con sencillez, sin artificios ni sensiblerías; utiliza la enfermedad de la protagonista, afasia, para dar el valor que merecen las palabras, el lenguaje, una de nuestras formas de comunicación.


Lo cierto es que esta novela me ha conmovido hasta el extremo, será, quizás, porque en mi entorno hay personas mayores, y muy mayores; me he detenido para pensar si he expresado la suficiente gratitud a quienes me han acompañado en la vida.


No me ha resultado una lectura triste, a pesar de todo. Aunque, sinceramente, pienso que también me voy haciendo mayor, y si no ocurre nada, me haré "vieja" (mejor, no lo pienso)   


"Cuando sea vieja pasaré horas así, atenta a cada sonido, a cada nota, a cada impulso. Sí, cerraré los ojos y me proyectaré mentalmente en la danza, en el trance, recuperaré uno a uno los movimientos, los quiebros, y mi cuerpo se ajustará de nuevo al ritmo, al compás, a la pulsación."


"Uno piensa que tendrá tiempo de decir las cosas, y cuando se quiere dar cuenta ya es demasiado tarde. Uno piensa que basta con dar muestras de cariño, con hacer gestos, pero no es verdad, hay que decir lo que siente. DECIR, esa palabra que tanto te gusta, Michka. las palabras son muy importantes, no hace falta que te lo diga a ti, que fuiste correctora para una importante revista, si no me equivoco."



11 comentarios:

  1. Siempre hay que dar gracias , el simple hecho de abrir los ojos cada mañana es dar las gracias por vivir.
    Es cierto que lo deberíamos hacer mucho más, y la palabra te quiero tan bien , porque después a veces es tarde decirlo a quien se quiere.
    Así pues desde aquí te doy las gracias y te diré que te estimo porque cuanto te leo te siento una persona cercana.
    La vejez no tiene por qué asustarnos si vamos asimilando que tendremos carencias , que serán suplidas por experiencias de la vida.
    Un besito y muy feliz fin de semana.

    ResponderEliminar
  2. Nunca debemos dejar de dar gracias, abrazos y de decir lo que sentimos pues nunca sabemos si será nuestra última vez.
    Gracias por la reseña.
    Buen fin de semana.
    Besitos

    ResponderEliminar
  3. No conozco la novela, por ahora, y si doy las gracias muchas veces al día, unas veces por cortesía y otras de corazón, tengo mucho que agradecer y procuro no olvidarme de hacerlo saber. Un abrazo

    ResponderEliminar
  4. Debe ser un libro para la reflexión, a pesar que soy persona de dar mucho las gracias , sintiendo lo que digo. estoy muy agradecida a todo lo que me rodea y como dice Ester, es bueno hacerlo saber.
    Fuerte abrazo

    ResponderEliminar
  5. No cuesta ningún trabajo dar las gracias aunque sea por el pequeño esfuerzo.
    Saludos

    ResponderEliminar
  6. Gracias y perdón son palabras que utilizo constantemente... en cualquier momento, ámbito y lugar.

    Besos.

    ResponderEliminar
  7. Hola Maite.
    Por los temas que la autora toca, no es de extrañar que te haya conmovido. Y si bien es cierto que no tengo gente mayor en mi entorno, puedo entender tus sentimientos. ¡No de tristeza!
    Sobre hacerse mayor, reconozco que no le doy valor ni al tiempo ni a la edad. Nací en el 48. Y para "mayor" sí creo que puedo ir... :))))))
    Ya lo de... (mejor, no lo pienso), ¡ni lo contemplo! Esa palabra suele tener la connotación de "lavadora vieja e inservible". ¡Y no es el caso!
    Justamente ayer nos trajeron la nueva lavadora. Habiendo fallado, y no por "vieja", estaba flamante, la anterior!
    Es un placer conocerte.
    Abrazos.

    ResponderEliminar
  8. Llevo algún tiempo, dándole las gracias al espejo, por las mañanas, en mis primeras abluciones.
    Y si lo hago conmigo, también acostumbro a hacerlo con los demás.
    Mis carencias, no quiero traspasarles a los que me rodean.
    Besos.

    ResponderEliminar
  9. Hola Maite, dicen que es de bien nacido ser agradecido, siempre doy las gracias y son sinceras, lo mismo que debemos decir siempre esas palabras que a veces nos cuesta y luego cuando pasa el tiempo es tarde para decirlo, por eso debemos decir lo que sentimos a los que queremos, la vejez es algo que todos llegaremos si no pasa nada aunque nos de un poco de miedo, es la vida.
    El libro por lo que nos dices se ve muy interesante, gracias por traerlo y dasnolo a conocer.

    Besos.

    ResponderEliminar
  10. Estoy de acuerdo, hay que decir lo que uno siente Maite. Tomo nota del libro. Gracias por compartirlo. Un abrazo

    ResponderEliminar
  11. La leí no hace mucho,  “la tengo reseñada en mi blog”  y te diré que me encantó a pesar de tener de entrada reticencias sobre novela y autora. Según se avanza en la vida se va dando cuenta uno de lo importante que es ser agradecido. Las citas que has entresacado del libro son maravillosas.
    Un beso, Maite

    ResponderEliminar

OSZAR »